El asentamiento definitivo del cultivo en La Vera tiene lugar a mediados del siglo XVIII, en pequeños bancales en la margen derecha del río Tiétar, en los llamados linares, sustituyendo al cultivo del lino.
La Comarca de la Vera da nombre al producto que se pretende proteger porque reúne las condiciones de tradición, prestigio, necesidad de protección y especialización del sector del pimentón.
La zona geográfica tradicional abarca, además, otras comarcas: Valle del Ambroz, Campo Arañuelo y Vegas del Alagón.